Consejos para lucir un cabello sano y fuerte

Mujer cuidando su cabello
Los numerosos factores a los que está expuesto el pelo - contaminación, frío o herramientas de calor- hacen que la rutina para un cabello sano cobre más importancia que nunca. Además de los numerosos productos y cuidados con los que podemos mimar la melena existen reglas de oro para un pelo lleno de brillo, fuerte y sano. Gestos diarios (que usan los expertos) para incorporar a la rutina de cuidado capilar.
Para lucir un cabello saludable es fundamental mantenerlo hidratado y protegido. Te damos los mejores consejos para tener un cabello sano y fuerte:

1. Cepilla el pelo dos veces por día, pero no abuses: Peinarte a la mañana y a la noche, no solo te hará lucir mejor, sino que también estimulará la circulación sanguínea. Pero no hay que exagerar ya que cepillar el cabello demasiadas veces al día puede hacer que se abran las puntas.

2. Evita los peinados demasiado tirantes: Pueden provocar la ruptura de la fibra capilar, propiciando la caída del pelo.

3. Tener una limpieza inteligente: Cada vez que te laves el cabello, masajéate el cuero cabelludo durante uno o dos minutos, trazando movimientos circulares y rectos con la punta de los dedos por toda la cabeza, aplicando presión ligeramente. Este proceso mejora la circulación sanguínea de la zona y puede ayudar a mejorar el aspecto del pelo, haciendo que parezca más fuerte y brillante.

4. Ten cuidado al cepillar el pelo si está húmedo: El cabello es más frágil cuando tiene humedad. Por esto, es mejor cepillarlo seco. Cuando está mojado, lo ideal es utilizar un peine de cerdas gruesas, que son menos agresivas.

5. Exfolia el cuero cabelludo: Para evitar la aparición de caspa o de picazón por el uso de gorros te recomendamos realizar una exfoliación del cuero cabelludo antes de su lavado, de este modo eliminarás cualquier célula muerta y el cabello aguantará más tiempo limpio.

6. Tener una alimentación saludable: Cuidar nuestra alimentación es fundamental para mantener nuestro cuerpo saludable por dentro y por fuera. Una dieta equilibrada rica en verduras de hoja verde como el brócoli, espinacas, acelgas, berro… y ácidos grasos del pescado, aportan a nuestro cuerpo Omega 3, Vitaminas A y C que ayudan a mantener nuestro cabello hidratado y acondicionado de forma natural, evitando que se rompa y fomentando su crecimiento.

7. No abuses del calor: Cuando llega el frío es habitual recurrir al secador, la plancha u otros aparatos de calor para contrarrestar el frío y el encrespamiento. Y realmente salir de la ducha y quedarse un ratito con el secador a toda potencia es uno de los pequeños placeres de la vida. Sin embargo, este tipo de aparatos dañan la estructura capilar, por eso lo mejor es reducir su uso al mínimo y, cuando los usemos, hacerlo con la menor temperatura y tiempo de exposición posible. Antes de utilizar el secador, procura usar una toalla para absorber toda la humedad posible y que el contraste del calor con el pelo mojado no sea tan drástico.

8. Hidrata y fortalece tu cabello: No solo hay que cuidar el cabello en el momento de la exposición solar, sino que también hay que hacerlo después. Para ello, te recomendamos utilizar champús, acondicionadores y mascarillas que te ayuden a hidratarlo y fortalecerlo. Para formular este tipo de productos, podemos recurrir a emolientes como los aceites y mantecas vegetales. También a hidrolizados de proteínas de origen vegetal.

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