¿Cómo defenderse del acoso laboral?

La Organización Mundial de la Salud define el acoso laboral o mobbing como una situación violenta o acoso recurrente dirigida hacia una persona, con el fin de aislarla de un grupo laboral. Estas acciones se caracterizan por ser conductas crueles y hostiles, que se convierten en una tortura psicológica para la víctima. Se estima que en la actualidad, más del 50% de las personas han sufrido de este tipo de acoso en el trabajo.

También se considera acoso cuando se da una conducta discriminatoria contra un trabajador que daña su dignidad y crea un entorno de trabajo hostil, humillante, ofensivo e intimidatorio.

Este acoso puede causar graves problemas psicológicos, incluso llegando a desarrollarse enfermedades, como la depresión, ansiedad, o estrés y a afectar gravemente tanto al trabajador en su rendimiento en el trabajo y en su vida personal.

El acoso laboral no es un problema moderno, sino que data de una larga historia en el mundo laboral. La diferencia es que en la actualidad, se ha tomado consciencia de que existe y se trabaja a diario para combatirlo, dado que es una de las mayores amenazas para el equilibrio de las empresas y el buen ambiente laboral.

Consejos para detener el acoso laboral

Identifica el problema: A menudo se confunde el mal ambiente de trabajo, ya sea con tu jefe o con tus compañeros, con acoso laboral. No es lo mismo. Puede que no te lleves bien con tus compañeros y eso te haga sentir mal en el trabajo, pero eso no es acoso. Del mismo modo, puede no gustarte cómo te habla tu jefe o pensar que solo te da tareas desagradables para fastidiarte. En estos casos leves, conviene no llevar las cosas al extremo e intentar hablar con aquellos que te causan malestar emocional en el trabajo.

Intentar ponerle fin: Puede parecer un consejo simple, pero es más complicado de lo que crees. Por norma general, si alguien te molesta de forma sistemática, ya sabe que lo que hace te disgusta. Hablar con él para que te deje de estar molestando solo funciona en casos aislados. Lo mejor es no atender a sus provocaciones, no ponerse violento ni a su nivel porque esa es una de las respuestas que los acosadores buscan. Debes estar calmado en todo momento y responder a sus provocaciones lo mejor que puedas, sin perder la calma. Un buen consejo es hacer algo que no se esperen.

Busca apoyo: No justifiques nunca los malos actos de los demás hacia ti. No son simples bromas y no van a parar si no haces algo al respecto. No te lo guardes todo para ti, explotando cuando ya no puedas más. Habla con familiares, amigos y con otros compañeros de trabajo sobre tu situación. Busca consejo y apoyo para poder afrontar esta situación.

Denuncia: En el caso de que la situación se vuelva insostenible o que sea tu propio jefe o un superior el que te increpa continuamente para que te marches del trabajo, no lo dudes y denuncia ante la Inspección de trabajo. Para ello necesitarás conseguir pruebas: grabaciones de voz, testigos, fotografías o algún tipo de documento; Procura no estar a solas con tu acosador o acosadores, es mejor si siempre hay un testigo presente por si necesitases su testimonio en el futuro.

Cambia de empresa: Si el acoso laboral continua después de todo lo hecho anteriormente en esta situación el mejor consejo que te podemos dar es que no soportes la situación más de lo debido y te vayas de ese mal ambiente cuanto antes. Desaparece física y también mentalmente. No dejes que una mala experiencia te amargue la vida.