Como recuperarse ante un resfriado

 


El resfriado común, también conocido como resfrío común, catarro o constipado, es una enfermedad infecciosa viral frecuente del aparato respiratorio superior que afecta la nariz, los senos paranasales, la faringe y la laringe. Es causado principalmente por los rinovirus, es autolimitada y puede afectar a personas de todas las edades. El virus se contagia a través del contacto con las secreciones nasales de la persona infectada o la inhalación de sus gotas de saliva. Los síntomas aparecen entre uno y dos días posterior al contacto.

Los síntomas incluyen generalmente rinorrea, coriza, obstrucción nasal, dolor de garganta, estornudos, malestar general, fiebre baja y tos; alcanzan su mayor intensidad entre el primer y tercer día de evolución y tienen una duración de siete a diez días, aunque ocasionalmente pueden persistir hasta por tres semanas. La fiebre se presenta con mayor frecuencia en niños. A medida que se avanza en edad, la incidencia del resfriado común es menor.

El resfriado común es un tipo de infección respiratoria alta distinto de la gripe, una infección viral más grave del tracto respiratorio que se diferencia por ser una enfermedad generalizada, con síntomas más intensos, especialmente en las vías respiratorias, las cuales suelen complicarse a nivel de los bronquios o pulmones. Así mismo, la gripe puede afectar simultánea o sucesivamente, el cerebro, las meninges, el corazón, las vías digestivas y la musculatura. No obstante, muchas personas confunden ambos términos.​



Si te resfrías, el resfrío probablemente durará una o dos semanas. Eso no significa que debas sentirte abatido. Además de descansar lo suficiente, estos recursos podrían ayudarte a sentirte mejor:

·         Permanece hidratado. El agua, los jugos, el caldo claro o el agua tibia con limón y miel ayudan a aflojar la congestión y previenen la deshidratación. Evita el alcohol, el café y las gaseosas con cafeína, que pueden empeorar la deshidratación.

·         Descansa. El cuerpo necesita sanar.

·         Alivia el dolor de garganta. Una gárgara con agua salada, 1/4 a 1/2 cucharadita de sal disuelta en un vaso de agua de 8 onzas (240 mililitros), puede aliviar temporalmente el dolor o la picazón de la garganta. Es poco probable que los niños menores de 6 años puedan hacer gárgaras adecuadamente.

·         También puedes probar con trocitos de hielo, aerosoles para el dolor de garganta, pastillas o caramelos duros. Ten precaución cuando les des pastillas o caramelos duros a los niños porque se pueden atragantar. No les des pastillas ni caramelos duros a los niños menores de 6 años.

·         Combate el taponamiento. Los aerosoles y las gotas nasales de solución salina de venta libre pueden ayudar a aliviar el taponamiento y la congestión. En los bebés, los expertos recomiendan aplicar varias gotas de solución salina en una fosa nasal, luego succionar suavemente esa fosa nasal con una pera de goma. Para hacerlo, aprieta la pera de goma, coloca suavemente la punta de la pera en la fosa nasal aproximadamente 1/4 a 1/2 pulgadas (alrededor de 6 a 12 milímetros) y suelta la pera poco a poco. Los aerosoles nasales con solución salina se pueden usar en los niños mayores.

·         Alivia el dolor. En el caso de los niños menores de 6 meses, administra únicamente paracetamol. Para los niños mayores de 6 meses, puedes usar paracetamol o ibuprofeno. Consulta al médico de tu hijo cuál es la dosis correcta para la edad y el peso de tu hijo. Los adultos pueden tomar paracetamol (Tylenol, otros), ibuprofeno (Advil, Motrin IB, otros) o aspirina.

·         Ten precaución cuando les des aspirina a niños o adolescentes. Si bien el uso de la aspirina está aprobado en niños mayores de 3 años, los niños y adolescentes que se están recuperando de una varicela o de síntomas similares a los de la gripe nunca deben tomar aspirina. Esto se debe a que la aspirina se ha relacionado con el síndrome de Reye, una enfermedad poco común pero potencialmente fatal, en estos niños.

·         Toma sorbos de líquidos calientes. Incorporar líquidos calientes, como sopa de pollo, té o jugo de manzana caliente, es un remedio contra el resfrío que se utiliza en muchas culturas y podría tener un efecto relajante y aliviar la congestión al aumentar el flujo de mucosidad.

·         Agrega humedad al aire. Un vaporizador o un humidificador de vapor frío pueden agregar humedad a tu hogar, lo que podría ayudar a aflojar la congestión. Cambia el agua a diario, y limpia la unidad según las instrucciones del fabricante.

·         Prueba medicamentos antigripales y para la tos de venta libre. En el caso de los adultos y los niños mayores de 5 años, los descongestionantes, antihistamínicos y analgésicos de venta libre podrían aliviar los síntomas. Sin embargo, no evitarán un resfrío ni reducirán su duración, y la mayoría tiene algunos efectos secundarios.

·         Los expertos coinciden en que no deben administrarse a niños pequeños. El uso excesivo o inapropiado de estos medicamentos puede provocar daños graves. Habla con el médico de tu hijo antes de darle medicamentos.

·         Toma medicamentos solo según lo indicado. Algunos medicamentos contra el resfrío contienen múltiples ingredientes, como un descongestionante más un analgésico, por eso, lee las etiquetas de los medicamentos contra el resfrío que tomas para asegurarte de no consumir una cantidad excesiva de ningún medicamento.

No hay comentarios.: